Las visitas al caribe siempre son un complicado examen para Costa Rica. Ir a Jamaica o a Trinidad y Tobago puede resultar un momento amargo. Afortunadamente Trinidad y Tobago no esta pasando por un buen momento. El reciente despido por parte de Rene de Simoes dejó en el cargo a Russell Latapy. Pero nuestra selección llegaba en el mejor momento anímico de la eliminatoria. A pesar de las ausencias, el equipo no cambió el esquema.
Empecemos por la última línea. Fernández y Díaz se quedan fuera. Por el lado izquierdo hay tres opciones; Segares, Marshall y un reposicionado Pablo Brenes. El primero ya tiene experiencia en la era Kenton. En la parte central no hay otra opción más allá de Darío Delgado. Pero Kenton siente que Delgado aun no esta listo para un partido de estos y prefiere utilizar a Segares como central izquierdo, tal y como lo había utilizado anteriormente. Entonces por el lateral izquierdo estaba entre Marshall y Brenes. Ante la potencia física de los caribeños don Rodrigo deposita sus esperanzas en Marshall. Hacerlo debutar no era una decisión fácil, cero experiencias internacionales para el jugador limonense, pero Kenton ve potencial en él. Demostrar el buen rendimiento del torneo anterior era lo único que le quedaba a Dennis Marshall. Creo que no decepcionó.
Por el lateral derecho ante la ausencia de Wallace por lesión, quedaba la opción de Pablo Herrera. Aquí no había más de adonde escoger, y la velocidad de Herrera era la única arma para contrarrestar los problemas que pudiera tener en el juego aéreo y en el choque.
A partir de aquí Kenton repite la alineación utilizada contra USA. Borges, Centeno, Sirias, Herron, Ruiz y Saborío.
El debut para Russell Latapy al frente de la selección de su país era una prueba bastante complicada. Ya había hecho de entrenador-jugador en Escocia, pero esto es un reto completamente diferente. El 4-4-2 estilo clásico europeo no va a cambiar en el esquema de Latapy. Por lesión quedaba fuera el delantero de referencia, Stern John. Silvio Spann tambien venia con problemas. Este ha sido un hombre importante en los últimos años. Pocos goles pero mucha entrega. Una lesión lo dejó fuera del pasado mundial. Latapy decide poner a hombres de su confianza. Hay una sorpresa. Hayden Tinto. 24 años de edad, primer partido oficial con la selección nacional. Latapy le da la camiseta 10, la misma que defendió por tantos años. El ataque fuerte trinitario estaba por el lado derecho. Desde Carlos Edwards en la lateral, Tinto como interior, además de las intervenciones de Spann.
Pero Marshall y Sirias se encargaron de aniquilar las opciones trinitarias. Durante el primer tiempo por ese sector no pudieron transitar con comodidad. Incluso Tinto fue sustituido en el medio tiempo, luego de un reacomodo de los hombres en la segunda línea caribeña. En el centro de la defensa, Umaña y Segares no dieron libertades, principalmente el primero que continúa sobresaliendo en cada partido. Tuvieron bastante trabajo ya que Scotland y Jones estaban con labores de presión directamente sobre ellos.
Dwight Yorke se dedicó al juego entre líneas de su equipo. Los ataques por el centro de Trinidad en el primer tiempo fueron de verdadero peligro para los costarricenses. La posición del equipo tricolor era bastante retrasada, con la última línea al borde del área grande. Había muchas libertades por el centro. El equipo retrocedía tantos metros, que mientras Centeno recogía los balones de los centrales, Bryan Ruiz buscaba el pase de Centeno o Borges en el círculo central, de enganche, esperando el movimiento por los costados de los compañeros. La mayoría de estos movimientos no funcionaron, principalmente porque en la salida había demasiados problemas, ya que perdían el balón constantemente en zona peligrosa de tercer cuarto de cancha. La presión de T&T no era asfixiante pero si efectiva.
En el segundo tiempo la mentalidad ofensiva cambió, jugando a tres toques (recibe, domina y pasa) para agilizar los movimientos. El cambio de Bolaños por Ruiz fue esencial, ya que este entró a realizar una función similar a la que intentó Ruiz, pero con mucho más atrevimiento y dinamismo, que permitió conectar más con los extremos. T&T presionaba tan arriba y con tanta libertad, que dejaban un espacio enorme entre los hombres del medio y la ultima línea. Ahí es donde CR hizo el mayor daño, colocando mas hombres en ese sector, como Bolaños, Centeno y principalmente los avances de Borges que pasaba del medio campo al área rival con total libertad. Además con presencia en el marcador, ya que no desaprovechó las dos opciones de gol que tuvo.
Y lo mas importante y destacado, la fortaleza mental para no decaer ante el empate de T&T. En el momento que parecía que el partido podía complicarse, en vez de pelotear largo para salir de la presión, el equipo no renunció a su juego, saliendo con balón dominado, con jugadas de rápida transición. Precisamente luego del segundo gol de los locales (min. 20 aprox.), CR mostró su mejor cara, dominando por completo las acciones. El partido por momento se tornaba vertiginoso de ida y vuelta pero los nacionales tenían el juego bien manejado, incluso pudiendo haber convertido, además del tercer gol, al menos uno mas para asegurar la victoria. A pesar de los intentos ya desesperados por empatar el juego, los trinitenses no encontraron la forma. Algunos tiros libres cerca del área en forma de centro pudieron darles la llave, pero hombres como Saborío brindaron el respaldo suficiente para aguantar el resultado.
La victoria mantiene al equipo en la primera posición de la hexagonal, con los mayores elogios por parte de la prensa internacional. Sin embargo esto no debe cegar o nublar los análisis correspondientes para el resto de la hexagonal. La realidad es que estamos a medio camino, con medio boleto asegurado, pero con una recta final vertiginosa con varios equipos hambrientos de buscar puntos de visitante, y obviamente no dejar puntos en casa. Dicen que es fácil llegar, lo difícil es mantenerse y ciertamente esto debe aplicar para los hombres de Kenton. Escuchando precisamente las palabras de este, creo que esta claro que ese es el pensamiento a seguir. Sumado a la participación del resto del cuerpo técnico como por ejemplo German Retana, harán lo posible para impedir bajar el ánimo, nivel de exigencia y entusiasmo. Asegurar la clasificación lo antes posible. Queda medio camino pero hasta este momento, todo pinta bien.
Foto:FIFA.com
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