Con respecto a la liga, escuchando más detenidamente las declaraciones de Marcelo Herrera y también de algunas otras informaciones que han surgido en los últimos días, hay que entender con un poco más de profundidad el momento que vive la LDA. Decía Popeye que el momento deportivo malo que están pasando llegó más tarde de lo esperado. Esto deja claro que haber llegado a la final del torneo anterior, no es que haya sido algo perjudicial, sino que tapó muchas deficiencias que debieron haber sido corregidas. Según los planteamientos de trabajo para toda la temporada, estos primeros meses del año siempre son complicados por el incremento de carga física para afrontar los meses más importantes del año. Esto es un poco complicado y difícil de notar en torneos cortos como el nuestro, pero en las ligas europeas es más evidente. Algunas veces esto no se nota en los equipos no por el rendimiento sino porque se dan los resultados. Además de este punto, es importante tener en cuenta que se fueron varios jugadores que fueron importantes, como Argenis Fernández, Windell Gabriels, Ignacio Aguilar y Eliseo Quintanilla. La Directiva aparentemente no dio mucho presupuesto para refuerzos. Marcelo Herrera solicitó un perfil de delantero 9, y lo único que se pudo conseguir a buen precio y a distiempo, a Nicolás Hernández. Con la salida de Quintanilla, dio presupuesto para que llegara el pájaro Juárez. En el caso de este último, al menos puso un poco de orden al ataque manudo, en los últimos partidos del torneo, pero esta temporada su nivel además de ser bajo, sumado al bajo rendimiento del resto del equipo, ha hecho que sus deficiencias pongan en duda la relevancia de su juego en el equipo. Por otra parte, Nico Hernández es el más criticado en los últimos días. Con lo mucho que necesita pelotear la liga, ese jugador 9 que necesitan parece que definitivamente no es este jugador. No sería el primero que descarta Herrera del equipo, pero si no mejora, no dudo en que el Popeye lo mandará a la banca. Lo mismo para Juárez. Lo que pasa es que Herrera les dará el tiempo necesario, y eso incluye terminar el torneo. De todas formas ya no hay marcha atrás. Aunque por lo menos los puede sacar del equipo titular.
Un punto importante y de los más cuestionados, es el de los salarios. Lo que le están pagando a estos extranjeros es un precio normal en latinoamérica. De eso no hay que asustarse. De lo que hay que asustarse es que a jugadores que se dejan el pellejo en la cancha como Lula Montero le paguen tan poco, comparado a estos otros. Ahí sí que hay una lucha de intereses y prioridades que deben ser analizadas por la administración.
Otro problema que ha tenido la LDA, es la utilización de jugadores para la selección nacional mayor, principalmente en el anterior torneo de la UNCAF, y también de jugadores sub-20, como Marco Ureña, que siempre fue buen relevo el torneo anterior. Con una plantilla limitada como esta, estas bajas son más importantes de la cuenta.
Como si fuera poco, ahora no tienen la cancha habitual de entrenamiento y para jugar partidos en casa, como lo es el Morera Soto. Los problemas que afronta la institución a nivel económico han hecho que casi por obligación ha tenido que cambiar la gramilla de natural a sintética, para aprovechar las ganancias por alquiler del inmueble para eventos deportivos y otros entretenimientos. También han construido otras canchas sintéticas fútbol 5 para ser aprovechadas por las ligas menores y de igual forma para público en general. El trabajo en ligas menores es uno de los aspectos más importantes que ha destacado Jorde Hidalgo, actual jerarca manudo, en donde quiere prestar especial atención, ya que es una de los pilares que han descuidado en los últimos años otras administraciones.
Con todo esto no dudo que la LDA mejorará su nivel, pero no sé, si dadas las circunstancias de los resultados de los otros equipos, ya es demasiado tarde para una eventual clasificación a la fase final. El aficionado alajuelense debe informarse bien acerca de la verdadera situación del equipo, darse cuenta de las posibilidades actuales, para poder formar su propio criterio de la manera más correcta. La liga vive momentos de un profundo cambio, de proyectos importantes que de lograr realizar con éxito, podrían traer un futuro más prometedor. En este momento no hay camino fácil y si de verdad esta institución quiere levantarse desde sus cimientos, deben tener un poco de paciencia. No me refiero a no echar al cuerpo técnico actual, sino tomando en cuenta toda la estructura de la institución, trazar los proyectos y procesos a largo plazo.
Un punto importante y de los más cuestionados, es el de los salarios. Lo que le están pagando a estos extranjeros es un precio normal en latinoamérica. De eso no hay que asustarse. De lo que hay que asustarse es que a jugadores que se dejan el pellejo en la cancha como Lula Montero le paguen tan poco, comparado a estos otros. Ahí sí que hay una lucha de intereses y prioridades que deben ser analizadas por la administración.
Otro problema que ha tenido la LDA, es la utilización de jugadores para la selección nacional mayor, principalmente en el anterior torneo de la UNCAF, y también de jugadores sub-20, como Marco Ureña, que siempre fue buen relevo el torneo anterior. Con una plantilla limitada como esta, estas bajas son más importantes de la cuenta.
Como si fuera poco, ahora no tienen la cancha habitual de entrenamiento y para jugar partidos en casa, como lo es el Morera Soto. Los problemas que afronta la institución a nivel económico han hecho que casi por obligación ha tenido que cambiar la gramilla de natural a sintética, para aprovechar las ganancias por alquiler del inmueble para eventos deportivos y otros entretenimientos. También han construido otras canchas sintéticas fútbol 5 para ser aprovechadas por las ligas menores y de igual forma para público en general. El trabajo en ligas menores es uno de los aspectos más importantes que ha destacado Jorde Hidalgo, actual jerarca manudo, en donde quiere prestar especial atención, ya que es una de los pilares que han descuidado en los últimos años otras administraciones.
Con todo esto no dudo que la LDA mejorará su nivel, pero no sé, si dadas las circunstancias de los resultados de los otros equipos, ya es demasiado tarde para una eventual clasificación a la fase final. El aficionado alajuelense debe informarse bien acerca de la verdadera situación del equipo, darse cuenta de las posibilidades actuales, para poder formar su propio criterio de la manera más correcta. La liga vive momentos de un profundo cambio, de proyectos importantes que de lograr realizar con éxito, podrían traer un futuro más prometedor. En este momento no hay camino fácil y si de verdad esta institución quiere levantarse desde sus cimientos, deben tener un poco de paciencia. No me refiero a no echar al cuerpo técnico actual, sino tomando en cuenta toda la estructura de la institución, trazar los proyectos y procesos a largo plazo.
